Normalmente se transfieren uno o dos embriones dependiendo de varios factores como las condiciones físicas de la mujer, la calidad de los embriones, la existencia de alguna cirugía previa en la matriz y el número de hijos. En la última década, la tendencia en los tratamientos de Fecundación In Vitro, ha sido reducir el número de embriones transferidos para evitar el riesgo de los embarazos múltiples.